Si quieres
comprar o vender un inmueble es necesario tener un avalúo inmobiliario. Te
explicamos qué es y para qué sirve.
Un avalúo
inmobiliario es la estimación del valor comercial, en cifras monetarias, de un
inmueble. Se hace mediante un dictamen técnico, en el que se revisan las
características físicas del lugar, la antigüedad, la calidad de los materiales
y acabados, el estado del inmueble, la zona en la que está y el uso de suelo.
Además de para
comprar o vender una propiedad, se solicitan avalúos para varias otras cosas,
dentro de las que destacan los créditos hipotecarios, para poder tramitar un
seguro del inmueble, el cálculo de impuesto sobre la renta. Para ello, existen
diferentes tipos de avalúos:
· Comercial, que es el que te da el valor
por el que un inmueble puede ser vendido o comprado.
· Bancario, sirve para establecer el monto
de un financiamiento bancario, es decir, cuánto dinero te pueden dar si pides
un crédito hipotecario.
· Fiscal,
que sirve para determinar el monto de impuestos y para hacer la escrituración
de la propiedad.
Los documentos básicos
que necesitas para sacar un avalúo, aunque cambian dependiendo de la propiedad,
son: la escritura de la propiedad, una boleta predial, el número oficial de la
propiedad y una constancia del uso de suelo. El precio del trámite se calcula
dependiendo del valor de la propiedad. Generalmente
el avalúo tiene una vigencia de seis meses, siempre y cuando la propiedad no
haya tenido cambios.